Una interesante propuesta de proyecto realizado por Cattani Architects. Las unidades habitacionales que serán utilizadas como residencia estudiantil en Le Havre.
La nueva ciudad es resultado de la transformación de viejos containers en unidades de viviendas modulares, equipadas con todo el confot necesario. Montadas sobre una grilla de metal, los containers han dado forma a un edificio de cuatro pisos que alberga 100 apartamentos de 24 m2 cada uno.
La arquitecto Cattani cuenta los pensamientos que acompañaron su trabajo cómo prevenir que los estudiantes, futuros inquilinos, no se sientieran puestos en una caja. Era necesario concebir algo liviano, transparente, y claramente no sólido. La idea era vivir independientemente, evitando el efecto de apilamiento.
La solución fue encontrada en un marco de metal que actúa como soporte estructural de los viejos containers, además de permitir escalonar las unidades y crear un nuevo espacio para los pasillos, patios y balcones. “La estructura de metal -dice Cattani- permite una mejor identificación de los diferentes espacios, y los mejora a través de la extensión de los exteriores que se convierten en terrazas y balcones. La secuencia de corredores transversales dan acceso a los departamentos y crean una sucesión de espacios llenos y vacíos en la fachada, que da a la estructura una mayor transparencia visual.”
Para asegurar el máximo de aislación térmica y acústica, los muros del container adyacentes al exterior y aquellos que dividen diferentes unidades fueron recubiertos con hormigón reforzado de 40 cm de espesor, incluyendo capas de goma para absorber las vibraciones.
La fachada externa está diseñada por la combinación de viejas “cajas” que han sido mantenidas ondulantes, repintadas color gris metálico. En el interior, los diseñadores escogieron muros blancos y mobiliario de madera. Cada estudio tiene un baño, una cocina y wi-fi gratuito.