La espectacular residencia de fin de semana del dueño de una aseguradora, Pierre Savoye, en Poissy marcha el fin del ciclo de casas puristas de Le Corbusier.
La Villa Savoye fue bautizada como ¨ las horas claras ¨ y se contó con un presupuesto muy holgado.
Se ubica en un terreno amplio y arbolado. Ofrece la imagen misma de un uso libre de los ¨ cinco puntos ¨de la nueva arquitectura, formulados en 1927.
Su exterior es estrictamente funcional, el volumen descansa sobre pilotis en una gran extensión de césped.
El acceso para automóviles es muy directo; se aparca entre los pilotes, debajo de la casa, y la curva de su trayectoria proporciona la forma semiredonda de la pared de vidrio de la entrada.
Se ofrecen dos accesos a los visitantes superada la pared acristalada de la entrada; una escalera y una rampa, que configuran la experiencia espacial original propia de la casa.
Para Le Corbusier, la escalera ¨ separa ¨, mientras que la rampa ¨ une ¨. Dentro del prisma de planta cuadrada, la vivienda se distribuye a lo largo de una planta en L, que separa la parte pública de la privada.
Este objeto tan singular, con elementos que evocan cubiertas y superestructuras de un trasatlántico también recuerda a los palacetes parisinos del S.18. por su distribución. Emplea marcos de ventanas de acero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario